El Archivero
El Archivero era broma 2009 de Blizzard de los Inocentes de una nueva clase de Diablo III.
Habilidades[]
Cortos en el juego de los clips de vídeo ofrecido tres de las habilidades del archivero - Lorenado, Bolt Quest y Silencio.
Imágenes[]
Dos capturas de pantalla en el juego y una imagen del concepto de arte se exhibían también:
Lore[]
El siguiente texto apareció en la página de Archivista en el sitio web oficial de Diablo III:
En mis escritos, me han contado historias de los bárbaros y sus interminables batallas con los demonios del norte congelado, y páginas dedicadas a los magos de Caldeum que aprovecharon las fuerzas primarias de la realidad. Pero el poder de estos héroes es nada comparado con el poder de los archiveros de la Frontera del Oeste. Estas almas valientes meterse en la batalla blandiendo Tomé y pluma, blindado y no en la placa embrujada o de eslabones de cadena, pero en el conocimiento de las generaciones pasadas. Estos archiveros luchar no sólo para nuestro futuro, pero para nuestro pasado así como.
La primera vez que encontró un archivero en las ruinas de la gran ciudad de Travincal. Al explorar uno de los templos abandonados de largo, me sentí atraído por el parpadeo de luz de las antorchas leve por una puerta distante, y luego, cuando me acerqué más cerca, por el sonido de una voz. Había una sensación en el aire de peligro cerca, una electricidad que hizo que los cabellos de mi lugar cuello. Me moví un poco hacia adelante, cortó la respiración en la garganta, agradecido por la seguridad de las largas sombras del pasillo. Luego lo vi.
Estaba rodeado, las formas que asoman de sus enemigos que pesan sobre él. Tenía el pelo desaliñado y cansado, las manos callosas cortadas y teñidas. Pero tenía un aire de confianza suprema, de una violencia sumergida, que amenazaba con explotar a la existencia. Dio un salto hacia adelante, con las manos agarrando las encuadernaciones de cuero de su enemigo más cercano.
Los ojos del archivero buscaron una apertura, una debilidad. Sus manos se arrancó repentinamente de su adversario y un crujido repugnante atravesó el aire inmóvil. Su columna vertebral rota, el libro yacía inmóvil en el agarre ahora suave del archivero. Cuando levantó su cuerpo sin vida en la penumbra, las páginas del antiguo tomo se abrió, los secretos del texto puesto al descubierto. Recuerdo las palabras que leía, el fervor religioso de su voz: "Aquí comienza la primera crónica de la vida de santa Akarat, profeta de Zakarum ...." Y en los estantes que se encontraba a su alrededor, tomo tras tomo de espera.
Tengo el máximo respeto por los archiveros, estos guerreros del mito y la leyenda. Sabemos sus nombres: Alimet Dos Quills, maestro de la iluminación con la mano izquierda y derecha; Morienne el escribiente, una comadrona cuya poesía se robó los corazones de los reyes tiranos y llevado a las lágrimas, y Salazar Cid, el transcriptor Maestro de Gea Kul, cuya caligrafía grandilocuente que se conoce en todas las tierras de los Mares Gemelos y más allá. Pero estos son sólo unos pocos elegidos. Los miembros de su fraternidad de honor son muchas, y su número crece cada día.
En los oscuros días que temo aún están por venir, mucho se decidió por la espada y el hacha, con el acero y el hechizo, pero creo que en el libro y tomo de nuestra supervivencia se encuentra.